viernes, 4 de enero de 2013

las sonrisas van viento en popa a toda vela

Tratando de esquivar las balas del pasado y no imaginando proyecciones del futuro, así es como vivo. No quiero imaginar si mañana por la mañana me voy a quedar dormida o si un coche me va a atropellar en aquel cruce al corte que he pasado más de 100 veces. Tampoco me va eso de vivir de recuerdos, de sentirme atada al pasado, de llevar un peso a las espaldas que me impiden seguir escalando...

Veréis, a mi lo que me gusta es sentir las cosas como la primera vez, que los pelos se me pongan de punta después de escuchar una canción 197892 veces, acabar paquetes de clinex sin conocimiento al ver una película de la que ya sabes el final, la emoción de un beso que recibes a cada rato, sentir como vuelas al subirte a una moto o que te tiemblen las piernas cuando le ves cruzar la esquina y acercarse a ti.

Trato de sentir cada momento como si fuese el último, coordinando razón y corazón sin pensar en los días de mierda que puede conllevar cada movimiento en falso. Vivir arriesgando y vivir rápido para no pensar. Amaneciendo cada día con el corazón intacto de golpes y la cabeza bien amueblada

buongiorno 2013, 5:00

Supongo que he vuelto a llegar tarde para explicar que este año a sido como uno de esos folios llenos de palabras, llenos de textos, que cuando escribes te salen directos del alma y que dan la sensación de ser preciosos, pero que al leer o echar la vista atrás rompes en mil pedazos por que no han servido para nada. Eso a sido para mi este 2012. Un puto borrador, un borrón y cuenta nueva, un error que calculo que no lo borre ni el tipex por que esta escrito a permanente, mayúsculas y subrayado en fosforito. Ni falta hace decir que no ha sido mi mejor año y que está en el raking de los peores, aunque supongo que no me arrepiento de nada de lo vivido, porque como dicen por ahí la practica traerá la soltura, que a base de palos se aprende y que nunca te arrepientas de algo que te ha echo sonreír , ya que a lo echo, pecho. Lo que no me puedo perdonar es haber cambiado tantas cosas en mi vida por algo que no ha cambiado nada por mí, es haber ignorado lo imprescindible en mi día a día por aquello que sabía que tarde o temprano se iría de mi, en dar todo para nada y perder la esencia que me completa. 


Supongo que este año no a cambiado mucho a los anteriores con respecto a la ida y venida de gente. La verdad es que nunca he sido mucho de esperar, soy más de que me esperen o que esperen de mí, y ese a sido mi error esperar, esperar un cambio que no llegaba, un vuelo que no despegaba, ese nosequé que me llenase y que no aparecía. Esperar más de la gente de lo debido me ha pasado una larga factura. Lo peor de todo no es haber engañado a gente que en verdad me quería y que quería lo mejor para mí, sino mi propio engaño, por que visto desde mi cabeza, ya amueblada, me he engañado a mi misma durante demasiado tiempo. No tener las ideas claras es algo que no va conmigo. Ahora, solo me queda suponer que después de la tormenta, el sol de mi vida se vuelva a poner a brillar, y ¿ sabéis ? me a parecido observar que últimamente el cielo está más despejado de lo normal, que aquellas cosas que antes me daban asco hoy son totalmente necesarias. Sí, NECESIDAD, estúpida necesidad. Sé que he cambiado, me he decepcionado a mi misma negando algo que era evidente, pero que quedé muy claro que no he cambiado por gusto, no he decidido cambiar, me han forzado a un cambio que nunca he querido. 


Lo peor de todo es que año tras año una de las cosas que saco en claro es que, en este mundo nunca debes dar la cara por nadie, por que nadie va a dar la cara por ti. Un consejo, sé lo más egoísta que puedas, piensa en los demás lo menos posible y por supuesto NUNCA dependas de nadie más que de ti mismo. Porque hasta los de verdad buscan lo más fácil, hasta los de verdad fallan, hasta los de verdad se ausentan, hasta los de verdad se van algún día. Salvan su culo para dejar el tuyo al aire. Hoy en día la gente se vende por un par de rallas y tres canutos. Nunca te fíes de nadie, lo digo por experiencia, este año confié tanto en alguien que aprendí a desconfiar y si os digo la verdad me va mejor. Hoy la jugada te sale mejor siendo ladrón que policía, siendo de los malos que de los buenos. El mundo se está volviendo un asco y a todos nos da lo mismo. Vivimos en una sociedad enferma de celos y envidia. El mundo no se a acabado pero se está acabando... Confío en mí y me basta. Y me sobra.

Y por supuesto ya que he aprendido la lección tendré que empezar a aplicarla; "usando el pasado de trampolín no de asiento"